Tú Eres Una Víctima

By Malú Collado

El autor describe y analiza momentos felices y dolorosos de la vida que dejan huellas difciles de borrar y llevan a determinaciones errneas. Nos conduce de la mano, empezando por la infancia y sus alegras, pasando por la difcil edad de adolescencia y sus preocupaciones principales, hasta una madurez adquirida, no tanto por el anlisis de los eventos, sino por un estado de fatiga y miedo a la adversidad e injusticia que victimiza al ser humano hasta la muerte. Da una solucin aparente y fuerte validacin a seres productivos, en los que descansa y por quienes sigue sobreviviendo nuestro mundo.

• Language: English
• Publisher: Palibrio
• Release date: Mar 5, 2012
• ISBN: 9781463319601

Malú Collado

Maria de Lourdes (Malú) Collado was born, lived, and educated in one of the largest capitals in the world—Mexico City. She worked in the field of sciences, administration, medical research, and social services for many years. Her hobbies include philosophy, history (biographies), and archaeology. She travels the world for conventions and as a tourist, admiring the wonders of different countries and races. Already retired, she is engaged in social programs with various humanitarian groups, and now she ventures as a writer. It tells us a philosophy of life with her experiences and acquaintances and the struggle to survive in this chaotic but happy world.

Book preview

Contents

DEDICATORIA

INTRODUCCIÓN

TÚ ERES UNA VÍCTIMA

NUESTRA NIÑEZ

LA ADOLESCENCIA

MATRIMONIO Y MADUREZ

MADUREZ Y VEJEZ

TÚ ERES EL SER MÁS VALIOSO

DE LA TIERRA

DEDICATORIA

Dedico este libro:

A mis hijos, que siempre han sido, son y serán mi más grande inspiración para sobrellevar y superar todas las barreras en esta vida para su seguridad, felicidad y bienestar. Con ellos a mis nietos, que son mi futuro y mi dicha de seguir viviendo.

A mis padres, con admiración, que con su amor, dedicación y ejemplo me enseñaron a sobrevivir y me dieron las armas para hacerlo.

Con todo cariño y agradecimiento a mi amiga, confidente y compañera de metas de superación personal y espiritual, a mi hermana, que ha estado luchando conmigo durante muchos años por una meta muy alta en la vida para nosotras y los nuestros.

A mis hermanos, que siempre fueron y serán una hermosa compañía, convivencia y la más grande y bella prueba de amor, fraternalismo y ayuda.

A mi esposo, que en su compañía no sólo superamos la adversidad, sino que crecimos juntos a ser mejores seres para lograr la felicidad individual, mutua y de los nuestros.

A todos mis familiares en mi país y en todos los otros donde se encuentran, con los que hemos conservado lazos de amistad y cariño y me han aportado muchos buenos ratos y consejos.

A mis amigos, profesores y compañeros, porque con cada uno aprendí algo por lo que vivir y por lo que luchar.

Agradezco, de corazon, el tiempo y la dedicacion prestados para el Diseño y Dibujo de la Portada al Artista de Arte Promocional: Alexander Buechel (www.Alexbuechel.com).

INTRODUCCIÓN

Yo se que estas pasando por muchas cosas ahora. Creemos que habitamos un mundo caótico lleno de problemas sin solución y sin salida. ¿A dónde llegaremos? ¿Qué pasará con nuestras vidas, nuestras posesiones, ideas y aspiraciones? Parece difícil contestar a todo ello sin entrar en la apatía, la desesperación y a veces una depresión profunda que nos lleva a encerrarnos en nosotros mismos y desconfiar de todo ser humano. Dónde quedó nuestra confianza en el amigo o vecino, dónde en el plomero que podía entrar tranquilamente a nuestra casa sin que nos preocupara su presencia y sus recomendaciones, dónde las tardes en los cafecitos presumiendo a tus colegas lo bien que te va y lo mucho que ganas. Porque pareciera que ahora tienes que cuidarte hasta de tu sombra. A qué se debe este sentimiento de inseguridad y desasosiego que nos invade cuando alguien nos cuenta lo que le pasó en la ciudad más remota del planeta y sentimos que pasa aquí en este lugar y en este tiempo.

Quiero decirte que yo como tú hemos sido víctimas de muchos y muchas veces. Yo como tú, sé que mi vida ha sido difícil, pero al mismo tiempo muy interesante y única como para poder escribir páginas enteras, hasta llenar un libro acerca de cada una de las etapas de ella. Tal vez es cierto que la realidad es más extraordinaria, fascinante y apasionada que las telenovelas modernas o las películas de Hollywood y es porque en ellas se encierran nuestros más recónditos sentimientos, amores y odios; los cuales nunca son mencionados por miedo, cobardía o por lo que mi tía decía: la vida es algo muy personal, que no se le cuenta al vecino. Como quiera que sea, hemos guardado nuestra historia, la que quisiéramos sacar algún día; la que queremos que alguien escuchara y nos comprendiera, que nos validara por nuestros esfuerzos, y nos compadeciera y ayudara en nuestras amarguras. Pero dónde están esos ángeles que nos protegen y que a veces buscamos en la obscuridad; dónde esos seres comprensivos y justos que te darían la razón y te perdonarían.

Yo tuve la suerte de tener unos padres buenos que me dieron una educación que me sacó de muchos atolladeros y me ayudó a conseguir un empleo cuando la vida me trato mal. ¿La vida? Pero, realmente sería la vida o sería otro de nuestros hermanos que por alguna razón muy suya desconocida, me hacía creer que yo no mereciera estar ahí o no debería tener algo, porque uno nunca puede tener todo lo que quiere. Quién sabe porque muchas personas nos tratan mal sin merecerlo o porque nos quitan lo que arduamente hemos obtenido. Hay tal vez muchas respuestas que todavía nadie me ha dado y que aún con mi educación, no he podido obtener.

Fui a la universidad, obtuve un titulo, una maestría y un doctorado, además de diplomados y cursillos por aquí y por allá y todo esto no me ayudó a prevenir muchas de las penas, sustos y contrariedades vividas. ¿Pero porqué? Me preguntaba a mí, a mis papás, profesores, amigos y hasta enemigos y no lograba resolver la incógnita. ¿Soy yo o es la demás gente? Una parte de culpa es tuya porque no te portas bien y la otra parte de los demás con los que convives, porque no sabes escoger a tus amigos decía mi mamá. Y tenía razón, pero no sabía yo como o no podía a veces escoger a mi familia, mi país, mi banco, ni mi gobierno, ni mis compañeros de clases, mis maestras, mi trabajo, ni muchas otras cosas o personas con las que me veía forzada a convivir.

Y entonces viví la vida y sufrí y lloré y llegué a la conclusión de que soy una víctima, pero no del destino, sino de la vida. O más específicamente, de algunas de las personas con las que me topé. Creí que eran buenas y no lo eran, confiaba y me traicionaban, pedía y no me daban, me esforzaba y no era recompensada, hablaba y no me escuchaban, les daba y no me agradecían. Es que tal vez el mundo es así. Y me preguntaba porque algunas personas, pocas por cierto, se veían felices, escogían bien a sus parejas, prosperaban y las finanzas y barreras no las afectaban. Que tenían estas gentes que no tenía yo o cuál era su secreto, en qué consistía ser feliz. Y a mí me tocaba luchar contra la adversidad en muchos medios diferentes.

¿Porque? No sabía porqué si había estudiado y me portaba regularmente y aparentemente bien, como me inculcaron en casa y las monjitas, me pasaban todas estas cosas malas o difíciles. Creía saber mucho y pertenecer a un nivel intelectual medianamente reconocido y sin embargo no encontraba una buena solución para arreglar mis propios problemas, ni los de los demás; ni evitar los percances en la calles de mi ciudad. Si tú tienes alguna respuesta déjamela saber, me encantaría que tú tuvieras la solución a mi desesperación. Qué podemos hacer para mejorar mi vida