Discover millions of ebooks, audiobooks, and so much more with a free trial

Only $11.99/month after trial. Cancel anytime.

Alicia en el país de las maravillas.
Alicia en el país de las maravillas.
Alicia en el país de las maravillas.
Ebook130 pages2 hours

Alicia en el país de las maravillas.

Rating: 4 out of 5 stars

4/5

()

Read preview

About this ebook

Alicia es una niña, en todo el sentido de la palabra; una curiosa, alegre y testaruda muchachita. Una tarde se encuentra con un Conejo vestido con saco y chaleco, que corre mirando un reloj, preocupado porque va tarde. Más allá de preguntarse cómo es que un Conejo viste saco y chaleco, lo que le causa curiosidad es ¿por qué el animalito iría tarde?
LanguageEspañol
Release dateNov 17, 2021
ISBN9789585107526
Author

Lewis Carrol

Lewis Carroll (Daresbury, 1832 - Guildford, 1898). Charles Lutwidge Dodgson era su verdadero nombre. A los 18 años ingresó en la Universidad de Oxford, en la que permaneció durante cerca de 50 años, y en la que obtuvo el grado de bachiller. Fue ordenado diácono de la Iglesia Anglicana y enseñó Matemáticas a tres generaciones de jóvenes estudiantes de Oxford y, lo que es más importante, escribió dos de las más deliciosas narraciones de la literatura universal: Alicia en el país de las maravillas y A través del espejo.Las Matemáticas fueron su pasión. También fue un notable fotógrafo, intentando recuperar, a través de este arte, la inocencia perdida (fotografió sobre todo a niñas, como Alice Liddell).

Related to Alicia en el país de las maravillas.

Related ebooks

General Fiction For You

View More

Related articles

Reviews for Alicia en el país de las maravillas.

Rating: 4 out of 5 stars
4/5

1 rating1 review

What did you think?

Tap to rate

Review must be at least 10 words

  • Rating: 4 out of 5 stars
    4/5
    Estuvo muy bien,me recordó a mí niñez cuando veía por la tele Alicia en el país de las maravillas por primera vez,me dio nostalgia y felicidad.Una de las cosas que no me gusto esque aveces era tan confuso que me molestaba un poco pero no llego a arruinarme el libro.

Book preview

Alicia en el país de las maravillas. - Lewis Carrol

Portada_plana_-_alicia_en_el_pais_de_las_maravillas.png

Colección Travesías Asombrosas

Título original: Alice’s Adventures in Wonderland

Autor: Lewis Carroll

Adaptación: María Fernanda Medrano

©Calixta Editores S.A.S, 2019

Para la presente edición.

Bogotá, Colombia

Editado por: ©Calixta Editores S.A.S

E-mail: miau@calixtaeditores.com

Teléfono: (571) 3476648

Web: www.calixtaeditores.com

ISBN: 978-958-5107-52-6

Editor en jefe: María Fernanda Medrano Prado

Coordinador de colección: Natalia Garzón Camacho

Adaptación: María Fernanda Medrano

Traducción: María Fernanda Medrano

Corrección de planchas: Juliana Méndez Aristizábal y Alvaro Vanegas

Maqueta e ilustración de cubierta: Juan Daniel Ramírez @rice_thief_

Ilustraciones internas: Julián Tusso @tuxonimo_art

Diseño, diagramación e ilustración de mapa:

David Andrés Avendaño @davidrolea

Primera edición: Colombia 2019

Impreso en Colombia – Printed in Colombia

Todos los derechos reservados:

Ninguna parte de esta publicación, incluido el diseño e ilustración de la cubierta ni las ilustraciones internas, puede ser reproducida, almacenada o transmitida en manera alguna ni por ningún medio, ya sea eléctrico, químico, mecánico, óptico, de grabación o de fotocopia, sin previo aviso del editor.

Contenido

POR LA MADRIGUERA DEL CONEJO

LA PISCINA DE LÁGRIMAS

UNA CARRERA LOCA Y UNA LARGA HISTORIA

EL CONEJO ENVÍA AL PEQUEÑO BILL

CONSEJOS DE UNA ORUGA

CERDO Y PIMIENTA

UNA LOCA FIESTA DE TÉ

EL CROQUET DE LA REINA

LA HISTORIA DE LA FALSA TORTUGA

LA CONTRADANZA DE LA LANGOSTA

¿QUIÉN SE ROBO LAS TARTAS?

LA DECLARACIÓN DE ALICIA

FIN

Surcando la tarde dorada,

nos lleva, ociosos, el agua,

pues son bracitos menudos

los que empuñan los remos

pretendiendo en vano con sus manecitas

guiar nuestro curso errante.

¡Ah! ¡Qué crueles las tres!

Sin reparar en el bálsamo de aquel día,

ni en el ensueño de aquella hora,

¡exigen un cuento de una voz sin aliento

que ni una pluma puede soplar!

Pero ¿qué podría una pobre voz

contra la perfidia de esas tres lenguas?

Prima, imperiosa, fulmina su edicto:

«¡que empiece el cuento!»

Secunda, con tono más amable, espera

«que no sean tonterías».

Mientras que Tertia interrumpe el cuento

no más de una vez por minuto.

Fue así, que entonces el silencio ganó,

Pero, en fantasía persiguen

a esa niña soñada

por un nuevo mundo de raras maravillas

en el que los pájaros y las bestias recobran el habla

¡y casi creen estar allí de veras!

Y cada vez que ese desgraciado intentaba,

agotada ya la fuente de su invención,

aplazar la narración hasta el siguiente día:

«El resto será para la próxima vez...»

«¡Ya es la próxima vez!», a coro las tres.

Así fue surgiendo el País de las Maravillas

poco a poco; y una a una

el cincelado de sus extrañas peripecias...

Y ahora que el relato toca a su fin,

también el timón nos guía de vuelta al hogar;

alegre tripulación, bajo el sol que se pone.

¡Alicia! Recibe este cuento infantil

y con mano amable déjalo descansar,

allí donde los sueños de la niñez se entrelazan

en la mística guirnalda de la Memoria

como la guirnalda de flores ya marchitas de un peregrino,

recolectadas en una tierra lejana.

La travesía a la locura

Alicia está loca. Esa es mi conclusión ahora que he terminado de traducir el libro, y es la misma idea que tenía una y otra vez cuando era pequeña. Pero es que la locura de Alicia es una cosa maravillosa, es una locura honesta, llena de curiosidad, salpicada con terquedad y mucha imaginación.

Podemos discutir si el libro hace parte del género de la literatura del sinsentido o de la literatura fantástica feérica (hadas), incluso ha sido considerado literatura surrealista, y quizá de alguna forma encaja en cada uno de estos. Alicia suele ser una chica que no le da mucha importancia a la locura que ocurre en este mundo de las maravillas, nada de lo que sucede dentro tiene mucha lógica, es totalmente fantástico y épico. Y para mí, esa es, precisamente, la magia que tiene este libro, y es que cada cual siente cosas diferentes con Alicia, con sus personajes y con la historia. Para algunos, Alicia es totalmente imprudente, una niñita molesta, pero que se divierte con todas las cosas que le pasan, justo por esas cualidades tan especiales; hay quienes creen que es una muchachita curiosa y fascinante y ríen a su lado en cada página, y otros que piensan que todo es solo el sueño de una pequeña.

Lo cierto es que Alicia se enfrenta a multitud de emociones durante su viaje, emociones que, por lo menos para mí, se asemejan mucho a las que uno puede sentir cuando es niño y empieza el viaje a la adultez. El desconcierto ante los cambios físicos –Alicia los vive una y otra vez en la primera mitad del libro, sin lograr regresar a su altura correcta–; la torpeza al hablar y comunicarte con otros –para Alicia se representa en las innumerables veces que ofende sin intención a los habitantes del País de las Maravillas–; o el desprecio que uno puede enfrentar al sentir que ‘no pertenece’ –Alicia se enfrenta furiosa al Sombrerero Loco y a la Liebre de Marzo con quienes es incapaz de comunicarse–. Pero la joven va evolucionando, poco a poco va entendiendo su entorno y se va dando su lugar.

Alicia en el País de las Maravillas es un viaje que todos hemos vivido y leerlo nos permite entenderlo mejor, nos da la posibilidad de encontrar caminos para que el viaje sea menos pesado y para que nunca olvidemos el camino de regreso a casa.

La traductora

POR LA MADRIGUERA DEL CONEJO

Alicia empezaba ya a sentirse bastante cansada de estar con su hermana a la ribera y sin tener nada que hacer: había echado un par de ojeadas al libro que su hermana estaba leyendo, pero no tenía dibujos ni diálogos. ¿Y de qué sirve un libro sin dibujos ni diálogos?, se preguntaba Alicia.

Así pues, reflexionaba, en su cabeza –tanto como podía, porque el calor del día la hacía sentir soñolienta y atontada– si el placer de tejer una guirnalda de margaritas la compensaría del trabajo de levantarse y recoger las margaritas, cuando de repente un Conejo Blanco con ojos rosados corrió muy cerca de ella.

No había nada muy extraordinario en esto, ni tampoco le pareció a Alicia muy extraño oír que el Conejo se decía a sí mismo, «¡Dios mío! ¡Dios mío! ¡Voy a llegar tarde!» –cuando pensó en eso más tarde, se le ocurrió que esto ha debido causarle duda, pero en ese momento le pareció totalmente natural–; pero cuando el conejo en realidad sacó un reloj del bolsillo de su chaleco, y lo miró y empezó a correr, Alicia se puso de pie, porque cruzó por su mente que ella nunca había visto un conejo ni con un bolsillo en un chaleco, ni con un reloj y, ardiendo en curiosidad, corrió a través del campo y fue justo a tiempo para verlo saltar dentro de una gran madriguera en la base del seto.

Un momento después, Alicia se metió también en la madriguera, sin detenerse a considerar cómo iba a hacer para salir de allí.

La madriguera se extendía en línea recta, como una especie de túnel, y luego de repente se torció bruscamente hacia abajo, tan bruscamente que Alicia no tuvo siquiera un momento para pensar en detenerse y se encontró cayendo por lo que parecía un pozo muy profundo.

O el pozo era en realidad muy profundo, o ella caía muy despacio, porque tuvo tiempo sobrado, mientras descendía, para mirar a su alrededor y para preguntarse qué iba a suceder después. Primero, intentó mirar hacia abajo y ver a dónde iría a parar, pero estaba todo demasiado oscuro para percibir algo. Después miró hacia las paredes del pozo y observó que estaban cubiertas de armarios y estantes para libros: aquí y allá vio mapas y cuadros, colgados de clavos. Cogió, a su paso, un jarro de los estantes. Llevaba una etiqueta que decía «MERMELADA DE NARANJA», pero vio, con desencanto, que estaba vacío. No le pareció bien tirarlo al fondo, por

Enjoying the preview?
Page 1 of 1